La decadencia, abandono y falta de gobernabilidad de la movilidad e
infraestructura de Bogotá en la actual administración Distrital de Claudia
López es latente. Solo por dar dos ejemplos que llevan al inconformismo a la
ciudadanía: la actual política de Pico y Placa extendido con cambios abruptos
de numeración y el tercer cambio de secretario de Seguridad y Convivencia en
casi dos años y medio. Los bogotanos y ciudadanos del área metropolitana
necesitamos un gobierno de verdad.
SALVAGUARDA LEGAL: La presente columna está enmarcada bajo el ejercicio de libertad de expresión en el marco de la oposición política protegido por el artículo 20 de la Constitución Política colombiana y en el artículo 13 de la Ley 1909 de 2018 o Estatuto de la Oposición.
Guardia Civil de Movilidad rechazada por abusos de autoridad y en lenta transición de capacitación (aunque he sido defensor de su existencia y política incluyente de generación de empleo); localidades como Chapinero donde las quejas contra la Policía Local por denuncias fuertes conocidas en la opinión pública por extorsión a comerciantes y vendedores informales -¿en sociedad con las agrupaciones criminales extranjeras que disputan el territorio del microtráfico y la prostitución de menores de edad con las mafias locales?-, Transmilenio que se volvió un sistema tremendamente costoso, ineficiente, peligroso, que atenta contra la salud mental ante la anarquía de ventas informales, mendicidad, tráfico de menores para mendicidad y actividades que perturban la ya estresante vida capitalina con las prédicas, cantos y contacto personal de cantantes informales (actividades que están prohibidas en el transporte público de países como Alemania y Francia debido a que si bien son actividades económicas o artísticas, son invasivas del espacio personal, la tranquilidad y la libertad individual y de cultos, y que en mi opinión deberían estar prohibidas aquí también)…llegando incluso a diferentes formas de acoso, violencia sexual y asesinato de mujeres. Y un SITP que no es eficiente, que no tiene un esquema de recargas de tarjetas rentable ni atractivo ni para el comercio ni para las empresas públicas comerciales, como las que administran las concesiones de giros, apuestas y loterías. ¿Solución para el ciudadano? Compre un auto, ande en cicla, scooter o ande a pie si le queda cerca el trabajo. En cualquiera de las anteriores, usted estará en peligro.
La alcaldesa mayor fue criticada en sus intervenciones por varios asistentes y líderes sociales que se encontraban en el Hotel Gran Park del centro de la ciudad en las socializaciones del Plan Plurianual de Inversiones 2022-2026 del Plan Nacional de Desarrollo para el Distrito Capital, porque su tono de voz, tipo de discurso son más de una precandidatura presidencial que de una administradora pública, que no es que le falte trabajo ante la crisis actual de la ciudad.
Frente a la situación actual de la ciudad, aquí debemos actuar primero desde el papel de ciudadanos, que con sectarismos, prejuicios o problemas personales. Aquí debemos llegar a la máxima del Presidente de la República Popular China Deng Xiaoping, “no importa que el gato sea blanco, o sea negro, sino que cace ratones”. Punto. Necesitamos gerencia, y la capacidad de hablar menos “carreta” y hacer más, debe ser prioridad y criterio para firmar en las calles, o para votar en las consultas partidistas citadas por la Registraduría para el próximo 4 de junio.
¿Quién lleva la delantera del balón? El Pacto Histórico y los partidos tradicionales, porque llegan con fuerza, capital político y social para recuperar el poder en la ciudad. La oposición bifurcada entre la centro derecha y la izquierda hacia la administración actual le dará una carta ganadora, donde los partidos deben hacer un juego inteligente desde sus candidaturas y democracia interna para que sus listas representan realmente el cambio generacional necesario para la ciudad.
La dinámica política pondrá retos a la centro derecha que deberá cambiar lenguajes, símbolos, discursos y lugares comunes que ya no funcionan con la opinión pública; bajar el lenguaje de odio focalizado al Gobierno Nacional y realizar tanto acciones de altura en el control político como en la construcción social de estructuras intermedias sociales desde la cultura y la educación (abandonas por la visión desarrollistas liberal que solamente da lugar a las ciencias, la administración y la ingeniería frente a las humanidades). Si la centro derecha no se pone seria, y sus nuevos liderazgos no adoptan ir a fortalecer los partidos tradicionales representando las corrientes que no se sientes representadas en sus directivas, u apoyando a otras fuerzas partidistas nuevas como Salvación Nacional, Nueva Fuerza Democrática, entre otros, su carrera política será un poco más difícil de llevar adelante. Si bien, los concejales, ediles y
diputados ganan por voto de confianza, el partido puede ser una llave o un portazo para conseguir llegar a los escaños electorales.
La centro izquierda e izquierda ya tiene sus núcleos y nichos sociales plenamente identificados, en especial los partidos pertenecientes al Pacto Histórico; pero será necesario el renacimiento de los partidos y de la centro derecha como garantía de libertad de expresión y democracia con calidad plena, responsabilidad administrativa y para que haya un cambio real donde todos se sientan realmente incluidos.
Jhon Jairo Armesto Tren: Periodista y escritor liberal independiente, director del podcast Colombia Nueva News en Spotify.
Actualmente es estudiante de Administración Pública Territorial en la Escuela Superior de Administración Pública-ESAP.